INTURMARK comienza a gestionar el Cobarcho en su nueva etapa. El Grupo de Empresas Familiares Marco Hernández ha establecido una alianza con la empresa PROFFETIONAL (responsable de las renovaciones de los hoteles del grupo), para adquirir, renovar y gestionar el Cobarcho.
Tras prácticamente 40 años de trayectoria, regentado por la familia Pérez Lanaspa, este emblemático asador ubicado en pleno centro comercial de Jaca, pasa a ser gestionado por la empresa INTURMARK, que actualmente ya gestiona el Hotel Oroel **** y el Gran Hotel *** de Jaca, junto con sus dos restaurantes. Por tanto, la oferta de Trattoría y Arrocería en sus hoteles, se amplía con un Asador en pleno centro.
Además, se ha ampliado con una zona de bar, ofreciendo una propuesta gastronómica de tapas que antes no tenía.
Pero la parte más llamativa del Nuevo Cobarcho está en la renovación de toda su imagen. Anteriormente estaba tematizado todo el local como una cueva con pinturas rupestres (de ahí su nombre, Cobarcho significa Cueva en Aragonés).
En el nuevo Cobarcho, desde la entrada al bar se ha mantenido esa imagen de las pinturas rupestres, pero integradas en un diseño más actual, con una decoración que transmite una mayor calidez, que invita a quedarse.
Además de mantener esa referencia a las pinturas rupestres, la decoración del nuevo Cobarcho está centrada en torno a la brasa y la leña, como se puede apreciar en la barra del bar.
Materiales como la madera, combinados con originales soluciones decorativas dotan a la renovación de este restaurante de una personalidad única y diferencial.
Y si a esta decoración sumamos las recetas tradicionales que han cimentado el éxito del Cobarcho a lo largo de toda su trayectoria, la brasa de leña totalmente renovada y la ilusión de un equipo humano renovado, podemos decir que se ofrece una experiencia digna de ser tenida en cuenta en un destino turístico con una significativa relevancia gastronómica, como es Jaca.
Las carnes y pescados a la brasa, junto con las recetas de la tradicional cocina alto aragonesa son la principal apuesta gastronómica del Cobarcho, que se podrán maridar con una amplia variedad de vinos, o cervezas, según los gustos del comensal.
Comienza por tanto una nueva etapa de este reconocido restaurante jacetano, con la ilusión de una completa renovación, pero manteniendo la esencia que ha permitido triunfar durante prácticamente 40 años, en una plaza con una gastronomía muy competitiva.