La Catedral de Jaca, una verdadera perla del Pirineo, se enorgullece de ser uno de los más importantes monumentos del arte románico en España, declarada monumento nacional en 1931, recibe cada año miles de visitantes de todos los rincones del mundo.
El templo está dedicado a San Pedro, se levanto sobre el monasterio que ya existía y llevaba el mismo nombre. En el año 1035 Sancho el Mayor, rey de Navarra y conde de Aragón, dejo antes de morir el condado de Aragón con el título de Rey a su hijo Ramiro. Este el rey de Aragón Sancho I Ramírez concedió a Jaca en 1077 un fuero que la convirtió en la primera capital del Reino de Aragón y sede episcopal, lo que hizo necesario la construcción de una catedral.
Comenzó a construirse en el siglo XI y las obras iniciales finalizaron a mediados de siglo XII. Está primera fase se realizó en dos etapas: la primera entre 1076 y 1086 y la segunda entre 1100 y 1131.
El edificio conserva en gran parte su estructura original románica: una planta basilical de tres naves de cinco tramos con sus correspondientes ábsides, dos puertas de acceso y una bella cúpula. El material empleado para la construcción fueron los sillares rectangulares de piedra.
La catedral tiene dos fachadas: La Fachada Occidental (35), que es la principal, conocida también como Magna Porta y la Fachada Sur. El crismón, o monograma de Cristo, de la Fachada Occidental es uno de los mas destacados del mundo románico, esta formado por ocho brazos y flanqueado por dos leones afrontados, que simbolizan según algunas interpretaciones las dos naturalezas de Cristo, la de vencedor y la de protector. Situado en la puerta principal, el crismón central es de los llamados trinitarios, denominados así por que incorporan la S del Espíritu Santo, marca la entrada en la catedral, considerada en los templos medievales, no solo un lugar de paso, sino la separación entre el mundo terrenal y la casa de Dios.
En la puerta de fachada sur destacan las esculturas románicas de los capiteles y el tímpano donde entre otros se representan a Abraham e Isaac y el episodio de la burra Balaam y el Ángel salvador.
A lo largo de su historia la catedral ha sufrido varios incendios (siglo XV) que destruyeron el techo original de madera, sustituido por bóvedas de piedra en el siglo XVI. También sufrió diversas modificaciones a lo largo de los siglos XVII y XVII, cuando se añadieron diferentes dependencias, capillas y retablos con elementos renacentistas y barrocos. De esta forma que la catedral fue creciendo y adaptándose a las necesidades y gustos de cada época. La cabecera original de la catedral que originalmente tenia tres ábsides semicirculares, fue sustituida en el año 1790 por un ábside semicircular central que cambio radicalmente el aspecto externo de la catedral, manteniéndose únicamente visible el ábside original situado en el sur. El nuevo ábside fue decorado en su interior con pinturas de la vida de San Pedro. Las pinturas fueron realizadas por el monje cartujo Manuel Bayeu Subías, cuñado de Goya.
El Museo Diocesano
El Museo Diocesano de Jaca que ocupa el claustro románico contiguo a la catedral, por su importancia le dedicaremos próximamente un post exclusivo, si bien adelantamos que su visita junto a la catedral es imprescindible, pues además de su colección de pinturas y otras obras de arte románicas, nos permitirá completar la visión sobre la catedral, siendo ambos unas joyas que no se puede perder en su visita a Jaca.
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Equipo Inturmark Hoteles